Ramon Guillem, el obispo
Originario del sur de Francia, fue prior de Sant Sernin de Toulouse, antes de que Alfonso el Batallador le nombrara obispo de Roda-Barbastro, desde donde desarrolló un actividad pastoral intensa, sobre todo en lo que se refiere a la consagración de iglesias.
Fue confesor del rey de Aragón y mantuvo estrechas relaciones con los señores de Erill.
Sus viajes a Francia e Italia le pusieron en contacto con los mejores artistas del momento
Los Erill, los señores feudales
Originarios de Erillcastell, sus posesiones se extendían por los valles de Boí, Barravés, Llevata y Sas.
Participan con Alfonso el Batallador en la reconquista de Barbastro (1101), Tudela, Daroca y Zaragoza (1118) y Calatayud (1120) y en la repoblación de nuevos dominios en las tierras de poniente (Alfarràs, Almenar, Fraga, etc.)
Son los promotores de buena parte de las iglesias de la Vall de Boí